REYNOSA, Tamaulipas – Con la entrega de bicicletas, muñecas, balones y peluches entre otros juguetes así como show de payasos y artistas locales, más de 10 mil niños fueron festejados hoy en esta ciudad fronteriza, por el empresario reynosense Javier Cantú Barragán.
En Reynosa, como en muchas ciudades mexicanas, desde hace 92 años se festeja cada 30 de abril el Día del Niño, fecha en la que el emprersario Cantú Barragán junto a su familia se dan a la tarea de entregar cientos de regalos a los asistentes, quienes desde un día antes hacen fila para ingresar a las instalaciones del lienzo charro “Los Tamaulipecos”
Como cada año, desde hace 13, Javier Cantú lleva a cabo un evento masivo para conmemorar “a lo grande” a los niños de esta ciudad fronteriza, quienes se dan cita en el lugar para empezar a disfrutar, degustar, jugar, correr y participar en los diversos eventos que les preparan con antelación.
El empresario altruista, quien el año pasado se hizo acreedor a la Medalla al Mérito Ciudadano “Ing. Marte R. Gómez” por su trayectoria de servicio a la comunidad, no deja pasar esta fecha y desde hace más de una década regala más de 10 mil juguetes y regalos, entre bicicletas, balones, muñecas, triciclos, juegos de té, juegos de destreza entre otros, a los niños que acuden al lienzo charro “Los Tamaulipecos”.
El reynosense, quien es propietario del lienzo charro de Reynosa, utiliza esas instalaciones para celebrar a los más pequeños del hogar, a quienes agasaja con juguetes, comida, bebidas, paletas y antojitos, juegos mecánicos, show de payasos y artistas locales, pinta caritas entre otras atracciones que de manera gratuita gozan los asistentes.
En entrevista el empresario reynosense señalo que en cada festejo aumenta el número de niños y niñas que acuden a dicho evento, “es muy satisfactorio ver como se divierten, como cambia su rostro al recibir un obsequio, como se ríen con las ocurrencias y chistes de los payasos” dijo.
Menciono que como cada año, en el marco del Día del Niño, se cumple el objetivo de “hacer felices a los reyes del hogar, de lograr que pasen un día contentos y en donde se les recuerda que tienen derechos, entre ellos al de gozar de su infancia”.
Cantú Barragán quien junto a sus hijas Oralia y Carolina y su hijo del mismo nombre, Javier, fueron los encargados de entregar los regalos a los niños, quienes en la mayoría provienen de familias vulnerables y otros más presentan algunos padecimientos de salud.
El organizador señaló que este año se contó con la presencia de personal de la Policía Federal y del Ejercito Mexicano, quienes aprovecharon el evento para convivir con los menores que asistieron al festejo.
Es así como Michelle y Ángel, ambos de 9 años de edad, no disimula su gusto por haber sido uno de los afortunados que se ganaron una bicicleta y degustaron paletas de hielo, burritos, jugos además de disfrutar del show de payasos y artistas locales..
Ángel, dijo que disfruta mucho ser niño, pues entre otras cosas le gusta recibir regalos y pastel en estas fechas así como salir a jugar y pasear.
El menor, quien habita en la colonia Benito Juárez de esta localidad, asegura que sus calificaciones “son muy buenas” y que por eso cada año sus papas lo llevan al festejo que se realiza en el lienzo Charro.
“Nos gusta venir, yo siempre vengo y mis vecinos y amigos también, pues todos nos llevamos premios, vemos a los payasos, nos subimos a los jueguitos y comemos” dijo.
Al igual que Ángel, Joana Alvarado Martínez, de 10 años de edad, disfruta la etapa de la infancia, pues asegura que le gusta jugar, correr, andar en bicicleta y ver la televisión.
La menor, quien también acudió al festejo, se dijo feliz porque este año se ganó una bicicleta y ahora podrá salir a pasear con sus vecinas y amigas.
Así como Michelle Guadalupe, Ángel y Joana fueron más de 10 mil los asistentes al décimo tercer festival realizado en el marco del Día del Niño, por el empresario altruista Javier Cantú Barragán, quien desde hace varios años busca favorecer a los grupos más vulnerables de Reynosa.
Nota de Editor: Fotos de Blanca Zumaya Escobedo.